domingo, 13 de diciembre de 2009

HACE UN AÑO ...

Ayer, hace un año, las calles frías me veían pasar, enfundados bufanda y guantes, tal vez con un gorro que tapaba la coronilla, tímidamente descubierta por el paso de los años. Los inviernos han ido pasando irrespetuosos, frescos y desapacibles, aunque llenos de estímulos, proyectos y esperanzas. Este año ha pasado realmente como uno más, aunque me haya hecho cambiar de década, convencional y temporalmente hablando, pues el envejecimiento biológico es cosa de cada día y el mental no depende tanto del deterioro de las células como de ese intangible que nos gobierna y nos hace ser como somos.
Curioso echo la vista atrás de este último año, y lo veo un poco como los anteriores, pero con este blog en mi "haber".
Todavía sigo como el primer día, sin saber muy bien hasta donde me va a llevar, si es que ha de llevarme a algún sitio. Parece fruto de pequeños impulsos que hacen que avance, no tanto como en el fondo yo quisiera. Los hombres proponemos y planeamos, pero la realidad nos marca un ritmo que a veces es difícil, incluso imposible, romper.
Ando últimamente algo descarriado en cuanto a mi producción escrita,y tengo temas en el tintero que parecen no querer salir a la luz. A veces es por cansancio, otras por sobrecarga laboral, bastants por problemas informáticas en el trabajo, donde, como algunos sabéis, he compuesto varias de mis entradas.
La Navidad 2009 ya está aquí y me hace recordar la 2008 y muchas otras, siempre con una mezcla de nostalgia y alegría, como creo que en el fondo a todos os ocurre. Tiempo hay para los buenos propósitos del año nuevo. Mientras tanto habrá que darlo todo en estos días que se abren a nosotros como el libro de la vida, de la esperanza por ser mejores con la ayuda de aquel que nació entre los pobres hace tantos y tantos años.
Gracias por estar ahí desde el 12 de Diciembre de 2008. Seguiremos al pie del cañón, con más o menos fortuna, el tiempo que sea menester, que seguro será mucho.

9 comentarios:

  1. No hace falta que el blog te lleve a ninguna parte. Al fin y al cabo, no tiene nada de malo ser una barca a la deriva. El viento puede guiarte a lugares maravillosos. =D

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  2. A mí me resula fascinante entrar en ese pequeño espacio de ti que dejas ver, es como encontrar un viejo baúl lleno de inspiración, siempre que vengo a leerte acabo con ganas de no cerrar mi blog al que me he planteado muchas veces dejar de alimentar. Eres aquí en lo virtual inspirador, y creete que estaá en la mejor edad de los hombres, disfruta...

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  3. El blog se alimenta de comentarios como el tuyo. Ánimo y no lo cierres, aunque los vientos soplen en contra.
    Besos esperanzados

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  4. Cada día empieza 'un nuevo año' y creo que el envejecimiento biológico ya empieza a edad muy joven. Jóvenes seguimos siendo, mentalmente y ojalá también físicamente. No sé en que nueva década entraste pero supongo una o dos décadas después de las mías. Tanto futuro!

    Un abrazo

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  5. Ay, no sabía que estaba el alias del otro blog mío, un poco abandonado y ayer estuve preparando un nuevo post que no terminé y, supuestamente, Blogger abrió la dirección de ese blog sin que yo lo supiera (sabía). Vamos a volver a giovanni! (de Tutto è possibile)

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  6. Pienso lo mismo que lucy, que un blog no tiene por qué llevarte a ninguna parte. Creo que en un blog se hace camino al andar, igual que en la vida. A mí me da muchas satisfacciones, sobre todo porque a través de él descubro nuevos universos como el tuyo.
    Un saludo

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  7. El blog no tiene por que llevarte, vas tú con él, y da muchísimas satisfacciones, I agree.

    Besos

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