Bailar no es lo mío, cantar tampoco, pero puestos a elegir me quedo con este pedazo de tenor argentino, engominado y enchaquetado, con una fuerza y una pasión difíciles de igualar.
Enfundado en ese traje y con un micrófono, acompañado de bandoneón, piano, contrabajo y violín quedaría rebién.
Que a ustedes les guste.
Cartografía de un camino de regreso
-
*La memoria* nunca es dócil. *Se disfraza de mar en calma*, pero guarda
siempre corrientes traicioneras. Dicen que *el tiempo es un río,* y quizá
lo sea...
Hace 1 hora
uaau..
ResponderEliminaryo tampoco bailo bien, pero apetece.
ResponderEliminarbs
Yo canto y vosotros bailáis, o viceversa.
ResponderEliminar